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Paulo Freire, precursor de la educación con democracia
El 19 de septiembre se conmemoró el natalicio de Paulo Freire, la Internacional de la Educación y FECODE promueven la reactivación de sus teorías, que promovieron un profundo cambio en la concepción del sistema educativo latinoamericano.
El pasado 19 de septiembre se llevó a cabo una jornada continental en toda América Latina en homenaje del natalicio de Paulo Freire, quien es el símbolo principal del Movimiento Pedagógico Latinoamericano.
En diciembre del año pasado se constituyó en Bogotá el Movimiento Pedagógico Latinoamericano y, desde ese momento, se tomó a Freire como su símbolo. Y, por ello, el segundo encuentro como Movimiento Pedagógico Latinoamericano va a ser el próximo año en Recife, su ciudad natal.
Paulo Freire nació el 19 de Septiembre de 1921, en Recife, Brasil. En una familia donde recibió una educación cristiana, que le enseñó el respeto y la importancia de la opinión de los demás. En el periodo en que escribe, la década de 1960 en Brasil, la colonización produjo una fuerte explotación de las masas de trabajadores, quienes eran casi esclavos y permanecían en la analfabetización. Los colonizadores utilizaban la educación mantener la explotación y la indignidad humana sobre los campesinos y nativos del lugar. En otras palabras, la educación o la ausencia de ella, era usada en el nordeste de Brasil para perpetuar la condición de miseria y explotación con una gran pasividad y silencio de parte del pueblo.
Allí, Freire critica la labor del educador que realiza depósitos que los estudiantes archivan dócilmente como conocimientos, lo cual denomina “educación bancaria”; a cambio propone, en sus propias palabras, "la pedagogía del oprimido, como pedagogía humanista y liberadora tendrá, pues, dos momentos distintos aunque interrelacionados. El primero, en el cual los oprimidos van desvelando el mundo de la opresión y se van comprometiendo, en la praxis, con su transformación, y, el segundo, en que, una vez transformada la realidad opresora, esta pedagogía deja de ser del oprimido y pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación" (Pedagogía del Oprimido). En resumen: la historia desde la perspectiva de los oprimidos, con sus necesidades y alcances.
De niño vivió hambre y pobreza en medio de la Gran Depresión, Su experiencia de vida le aportó para iniciar su método de analfabetización, el cual no se conforma con enseñar a leer y a escribir, sino que busca producir un cambio efectivo y real en el hombre mediante su comprensión de él y del mundo que lo rodea. Hoy, el éxito de Brasil se le reconoce a los cambios derivados de este hombre.
“Él unió pedagogía con crítica y la crítica, no en un sentido literal o textual, sino en un sentido profundamente político. Entonces hay dos cosas para identificar, por un lado, su propuesta es muy política porque él propone que la educación puede trabajar por el cambio social, por la unidad en Latinoamérica, por la justicia social, por la libertad, por la igualdad y por la soberanía de los pueblos.
Pero, al mismo tiempo, diseñó una estrategia de carácter pedagógico; para eso, una estrategia basada en otros postulados: 1. Que la educación debe empezar por hacer una crítica de la sociedad. 2. La crítica de la sociedad se debe hacer a través de un proceso de democracia y de diálogo, la practica metodológica donde el maestro debe sentarse en el dialogo. 3. Debe estar orientada a formar una conciencia crítica para el cambio. Y 4. posicionar al sujeto como objeto histórico y político”, explicó Jhon Ávila, director del CEID de FECODE.
Freire es, entonces, el símbolo de la democracia en la educación porque trascendió con su propuesta pedagógica los límites de Brasil. Es señalado como uno de los últimos pedagogos del mundo que han analizado la problemática educativa desde un punto de vista integral.
El pasado 19 de septiembre se llevó a cabo una jornada continental en toda América Latina en homenaje del natalicio de Paulo Freire, quien es el símbolo principal del Movimiento Pedagógico Latinoamericano.
En diciembre del año pasado se constituyó en Bogotá el Movimiento Pedagógico Latinoamericano y, desde ese momento, se tomó a Freire como su símbolo. Y, por ello, el segundo encuentro como Movimiento Pedagógico Latinoamericano va a ser el próximo año en Recife, su ciudad natal.
Paulo Freire nació el 19 de Septiembre de 1921, en Recife, Brasil. En una familia donde recibió una educación cristiana, que le enseñó el respeto y la importancia de la opinión de los demás. En el periodo en que escribe, la década de 1960 en Brasil, la colonización produjo una fuerte explotación de las masas de trabajadores, quienes eran casi esclavos y permanecían en la analfabetización. Los colonizadores utilizaban la educación mantener la explotación y la indignidad humana sobre los campesinos y nativos del lugar. En otras palabras, la educación o la ausencia de ella, era usada en el nordeste de Brasil para perpetuar la condición de miseria y explotación con una gran pasividad y silencio de parte del pueblo.
Allí, Freire critica la labor del educador que realiza depósitos que los estudiantes archivan dócilmente como conocimientos, lo cual denomina “educación bancaria”; a cambio propone, en sus propias palabras, "la pedagogía del oprimido, como pedagogía humanista y liberadora tendrá, pues, dos momentos distintos aunque interrelacionados. El primero, en el cual los oprimidos van desvelando el mundo de la opresión y se van comprometiendo, en la praxis, con su transformación, y, el segundo, en que, una vez transformada la realidad opresora, esta pedagogía deja de ser del oprimido y pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación" (Pedagogía del Oprimido). En resumen: la historia desde la perspectiva de los oprimidos, con sus necesidades y alcances.
De niño vivió hambre y pobreza en medio de la Gran Depresión, Su experiencia de vida le aportó para iniciar su método de analfabetización, el cual no se conforma con enseñar a leer y a escribir, sino que busca producir un cambio efectivo y real en el hombre mediante su comprensión de él y del mundo que lo rodea. Hoy, el éxito de Brasil se le reconoce a los cambios derivados de este hombre.
“Él unió pedagogía con crítica y la crítica, no en un sentido literal o textual, sino en un sentido profundamente político. Entonces hay dos cosas para identificar, por un lado, su propuesta es muy política porque él propone que la educación puede trabajar por el cambio social, por la unidad en Latinoamérica, por la justicia social, por la libertad, por la igualdad y por la soberanía de los pueblos.
Pero, al mismo tiempo, diseñó una estrategia de carácter pedagógico; para eso, una estrategia basada en otros postulados: 1. Que la educación debe empezar por hacer una crítica de la sociedad. 2. La crítica de la sociedad se debe hacer a través de un proceso de democracia y de diálogo, la practica metodológica donde el maestro debe sentarse en el dialogo. 3. Debe estar orientada a formar una conciencia crítica para el cambio. Y 4. posicionar al sujeto como objeto histórico y político”, explicó Jhon Ávila, director del CEID de FECODE.
Freire es, entonces, el símbolo de la democracia en la educación porque trascendió con su propuesta pedagógica los límites de Brasil. Es señalado como uno de los últimos pedagogos del mundo que han analizado la problemática educativa desde un punto de vista integral.
http://www.fecode.edu.co/index.php/noticia-informativa-3
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